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Pescando Carpas con Mosca
Antes de empezar a pesca con mosca dediqué algún tiempo a pescar ciprínidos utilizando técnicas variadas. Era una pesca bastante divertida, pero hacia falta algo, algo que ya he encontrado gracias a una caña de mosca. La pesca con mosca está hecha de desafíos y todos los días creo en mi cabeza el momento en que intento capturar una especie que para muchos sea difícil o imposible de pescar.







Cuando por fin, cuando ese momento llega, soy feliz aunque los resultados no sean los mejores, se que llegará el día en que lograré pescar y libertar aquel pez que con tanta dificultad conseguí engañar.

En el caso de que este artículo te anime a probar esta modalidad, no desistas a la primera dificultad, tienes que insistir, ya que la clave para obtener buenos resultados en la pesca de la carpa con mosca es la persistencia.

La carpa no necesita de presentación, ya que es una especie común en todos los embalses y lagos. Por esta causa será fácil encontrar muchos pesqueros perfectos, o casi, para su pesca con mosca. Será necesario que el pescador esté algún tiempo analizando las zonas de pesca, especialmente el comportamiento de las carpas. Es fundamental, ya que las carpas demuestran un comportamiento distinto de un sitio a otro. En un embalse, por ejemplo, las carpas pueden demostrar más actividad en una zona en que es imposible pescar con mosca, pero puede existir alguna otra zona en que no muestren tanta actividad pero que sea el sitio ideal para pescarla con mosca y será allí donde les gustará tentar nuestras moscas.

En cuanto a sus hábitos de alimentación puede afirmarse que la carpa es una especie omnívora, y que su alimento será tanto de origen vegetal (algas acuáticas, pequeños frutos silvestres o cereales) como animal (todo el tipo de larvas acuáticas, insectos alados, alevines o crustáceos).

Aunque muchos pescadores no lo sepan, las carpas buscan prácticamente todo su alimento junto a la orilla, en zonas de poca profundidad y preferentemente con alguna vegetación, ya que en estas zonas es donde viven y se desarrollan las larvas y insectos y donde pueden obtener semillas y pequeños frutos.

Es común observar a las carpas moviéndose en pequeños grupos o solas por zonas bajas y orillas. De esta forma fue como logré, durante las jornadas de pesca y observación, comprender el significado de algunos de sus comportamientos, ayudándome, en muchos casos a distinguir si están activas o simplemente tomando un poco de sol.

El Material

En la mayoría de los casos, las carpas pescadas con mosca son de buen tamaño, pesando una media entre los 2 Kg. y los 4 Kg., aunque no sea infrecuente tener algunas sorpresas con ejemplares de mayor tamaño. Así que, no es regla utilizar material "pesado" para este tipo de pesca, si la zona de pesca no tiene obstáculos sumergidos visibles, como árboles; podemos utilizar sin problemas material ligero, aunque yo nunca utilice cañas de numeración inferior a línea 5, que, sin duda, proporciona momentos de gran emoción. En los casos en que los ejemplares pesan más que 4 Kg la mejor opción es sin duda una caña para línea 7 o 8, ya que pasará un rato hasta tengamos la carpa en las manos.



Yo, personalmente, utilizo una caña para línea 5 para los ejemplares mas pequeños y una caña para línea 8 cuando veo que las carpas grandes andan cerca. Una caña más fuerte nos permite controlar mejor la lucha y la emoción de la captura será tan grande como si estuviéramos pescando con una caña de numeración inferior. A veces me preguntaba: ¿Con una caña para línea 8 sentiré la lucha del pez? La respuesta la tuve cuando logré clavar la primera buena carpa con una caña de esta línea, todas las dudas se desvanecieron rápidamente. He visto que muchas veces es mejor utilizar material un poco mas fuerte para conseguir dominar la lucha fácilmente. Claro que con una caña más ligera la lucha es diferente y además tenemos que pensar que estamos trabajando con el material al límite, que es como más me gusta a mí. Por supuesto que también tendremos el doble del trabajo, mas al contrario que en otras modalidades, en estas circunstancias el mejor momento será sin duda cuando las estamos pescando a pez visto y vemos la carpa a comer nuestra ninfa y su primera carrera.



Para completar el equipo, necesitamos de un carrete. Es importante que tenga un buen freno y con por lo menos 100 m. de backing de 20 Lb por lo que pueda pasar, puesto que en la pesca de la carpa con mosca el carrete será muy utilizado, ya que la carpa es muy fuerte y la línea se va volando, siendo el sonido producido una bonita música para nuestros oídos.

En cuanto a la línea no hay mucho que hablar. Creo que algo importante es que tenga un color discreto, también es conveniente pintar los primeros 2 m., esto se debe a que si las aguas son transparentes o si están en aguas muy bajas, la carpa se asustara pronto si cae cerca la línea. Es también importante tener atencióna que, cuando se clava una carpa con mosca, la primera carrera es muy violenta, llevando muchos metros de línea, siendo por eso imprescindible saber como tenemos la línea que está fuera del carrete, porque si algo la obstruye o si se queda presa en el carrete es fácil que el bajo se rompa.



La elección del bajo de línea (lider) va depender de la situación de pesca, podemos optar por pescar con uno de 2,70 m de largo, aunque se pueda subir un poco más hasta los 3 m cuando las aguas son mas claras y bajas, pero esto es algo que cada pescador tiene que decidir. Muchas veces, las carpas están tan cerca de la orilla que estamos obligados a lanzar de modo a que solamente entre en el agua 50 cm del bajo, en estos casos es mejor usar bajos no muy largos, ya que es fácil que quede preso entre alguna rama cualquier otra traba situada fuera de agua y no será nada bueno. En cuanto al tippet, yo utilizo entre 0,18 y 0,23 mm dependiendo del tamaño del pez y de si hay o no hay muchos obstáculos en el agua y fuera de ella también.

Las Moscas.

El hecho de que las carpas demuestren actividad, tanto en la superficie como por debajo de la misma, nos obliga a tener moscas de varios tipos, como ninfas lastradas, ninfas sin lastre, moscas secas y streamers. Aunque las carpas durante los meses más calientes del año muestren un comportamiento más agresivo, en los que entran a streamers coloridos cuanto estamos pescando basses por ejemplo, vamos hablar de moscas más discretas, moscas que imitan su alimento natural.

Las ninfas que imitan las larvas que viven en aguas bajas junto a las orillas pueden ser hechas en anzuelos entre el numero 8 y el 16. Las ninfas montadas en anzuelos mas grandes son para imitar larvas de libélulas o pequeños peces y las ninfas montadas en anzuelos mas pequeños imitan pequeñas larvas de algunos insectos que viven en las piedras y vegetación. Si las carpas no están agresivas, que es lo más habitual, es necesario utilizar ninfas más pequeñas y de colores más naturales como el oliva y el negro. Podremos hacer también imitaciones de insectos terrestres en anzuelos número 10 o 12 que pueden ayudarnos en algunas situaciones muy especiales. Entre los muchos materiales que existen en las tiendas, podemos seleccionar para el montaje de insectos terrestres el foam aunque existen algunos materiales naturales que para mi son mejores y más eficaces en acción de pesca.

Muchas veces, en algunos lugares, las carpas están acostumbradas a comer algunos pequeños frutos silvestres que caen de las ramas de los árboles situados junto a las orillas, otras a comer las sobras de cebos dejados por otros pescadores como el maíz. Así que es importante tener siempre en nuestra caja algunas imitaciones de este género. Para hacer imitaciones de frutos o maíz lo mejor es utilizar el pelo de ternero teñido del color que deseemos. Este tipo de material es el mejor para mí, ya que así la mosca tendrá el peso ideal para hundirse lentamente y la consistencia ideal para que el pez no la ponga fuera de su boca antes de ser clavado.

Pesca con Ninfa.

Algunos de los momentos más espectaculares que se viven en la pesca de carpa con mosca son aquellos en que tenemos que andar por las orillas, despacio, en silencio, completamente envueltos en la naturaleza, esperando encontrar una carpa alimentándose y ponerle la ninfa en su trayectoria para intentar despertar su interés.
En el verano, cuando el calor se hace sentir, las carpas se pueden ver por las orillas, especialmente por la mañana, bien temprano, cuando todavía no hay viento. En estos momentos son más fáciles de pescar, pero en estas circunstancias, el término “fácil”, tiene mucho de que hablar…



Las situaciones más comunes se producen cuando encontramos las carpas en agua poco profunda envueltas en los detritos que levantan del fondo cuando esta buscando alimento. En algunos casos, conseguimos ver su aleta saliendo del interior de la nube de fango incluso la podemos ver fuera del agua. Para conseguir el éxito en estas situaciones tenemos que colocar delicadamente una ninfa poco lastrada donde se esté alimentando, de modo que vea que es una presa que acaba de descubrir. Si la carpa la consigue ver -ya que en la mayoría de las veces no la ve- y no conseguimos su reacción, la carpa la tomará si aplicamos un poco de tensión en la línea para que la descubra a través del movimiento del señuelo. Otra situación común es cuando las carpas andan por las orillas con las espaldas fuera de agua buscando comida.

Cuando las carpas se alimentan de forma menos clara, desplazándose entre las hierbas que están en la orilla, sabe muy bien que es vulnerable y estará ciertamente alerta, bastando cualquier fallo para que todo se eche a perder. Es muy fácil fallar en estas situaciones, siendo el fallo más común una mala presentación de la ninfa. Mas no siempre una mala presentación significa perder la oportunidad de clavar la carpa. Algunas veces he lanzado la ninfa delicadamente quedando la carpa indiferente, esto me ha obligado a lanzar de nuevo de forma que la ninfa caiga con alguna fuerza en el agua para llamar su atención.

Puedo decir que esto funciona bien, aunque a veces haya que dar algunos pequeñitos tirones en la ninfa, en estas circunstancias habitualmente las carpas se voltean entrando a la ninfa con velocidad. Pero, para contrastar con esta situación, puedo afirmar que algunas veces, me ha sucedido que al acercarme a una carpa e intentar poner la ninfa cerca, le ha caído encima, haciendo con que la carpa salga volando para aguas profundas. Es realmente impresionante ver la velocidad con que las carpas se van cuando sienten una situación de peligro.

Con Seca

En la pesca con mosca debemos estar dispuestos a afrontar cualquier situación, y una de las mejores es encontrarnos con un día en que las carpas estén comiendo en la superficie. Estos casos, por lo menos donde yo acostumbro pescar, no son muy comunes, y se dan sobre todo en los días calidos. Yo solamente he tenido la suerte de ver dos veces carpas comiendo en la superficie, y en una ocasión de las dos tuve la magnífica suerte de clavar una. Muchas veces, cuando las carpas buscan comida en el fondo cerca de las orillas, es común detectar algunos insectos terrestres que caen al agua, y es estas condiciones no se quedan indiferentes: suben despacio y toman la mosca suavemente. Cuando se observe una situación de este tipo en aguas bajas, y tenemos una ninfa en el bajo de línea, tenemos dos opciones: cambiar la ninfa por una seca e intentar suerte, caso de que la carpa se quede en el mismo sitio cuando se haya terminado de atar la mosca, ya que en cuanto se alimentan las carpas se mueven constantemente; o arriesgarse a utilizar la ninfa. Yo en estos casos, aconsejo lanzar la ninfa y aprovechar la oportunidad, pues si la carpa ve la ninfa es muy probable que la tome. Claro que si la carpa esta tomando insectos en la superficie pero en aguas más profundas es mejor colocar una seca pues con ninfa obtener buenos resultados será muy complicado, aunque no imposible, ya que en alguna ocasión logre clavar una así con una ninfa, bien lejos de la orilla.

Cada jornada de pesca de carpas con mosca es una aventura que nos deparará siempre nuevas situaciones y experiencias, serán días en que nuestra técnica se puede transformar en acontecimiento o en fracaso. Pero, como he explicado anteriormente, cada zona de pesca es diferente y es completamente imposible generalizar. En este artículo he hablado en un segundo plano sobre las experiencias que me han sucedido pescando este pez, su pesca cada día me depara una nueva, así que no es raro que cada vez me guste más pescarlo con mosca.

Como una de las principales conclusiones os diré que creo que lo más importante es utilizar todos nuestros sentidos para estudiar el pesquero, y después de una observación cuidada, utilizar nuestra inteligencia para engañar el pez. Realmente esta es la verdadera clave de su pesca.

De cualquier forma, mas allá de todos los pequeños trucos que he propuesto anteriormente, son igualmente importantes algunos factores como la rapidez y precisión del lance, en el que estar siempre atento y rápido es fundamental para que todo salga bien. Bueno, quien soy yo para decir esto, ya que muchas veces cuando veo una carpa la adrenalina sube de tal manera que todo me sale mal: la línea se enreda en la caña, la ninfa queda en las hierbas o en la punta de la caña. Y es en esos momentos cuando una gran carpa, puesta delante de mí, no me deja discernir si miro la carpa para que no me salga de mi campo visual o si miro para lo que estoy haciendo. Son situaciones como estas, muchas veces un poco cómicas, las que forman parte de la pesca y que me dan animo para que la próxima vez, cuando vea otra carpa, consiga hacer todo perfecto y retratarla en una preciosa foto.

Buena pesca y acuérdense siempre de practicar el CATCH & RELEASE.
Por:
José Rodrigues / Portugal
&
Pedro Cordero / España.


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