Llegamos al río cerca de las 4 a 5 de la tarde, de una semana de verano que de verdad no recuerdo la semana, ni día, ni fecha, ya que era cerca del décimo día de pesca de la excursión de que habíamos organizado pescando desde Tierra del Fuego, pasando por Paine y rematar en las cercanías de Punta Arenas.
Aquel día, estaba predispuesto a tener una pesca de moscas secas y lideres de baja numeración, ya que los días anteriores el clima nos había jugado una mala pasada y ya llevábamos varios días pescando con streamers y ninfas en ríos de alto caudal. En base a esto mismo, recordaba perfectamente el río Gallegos Chico, que esta en la misma altura del río penitente, lo cual me dio ideas de cómo pescarlo, el cual tenia la misma estructura de agua que el río penitente pero en menor escala.
La estructura del río es de poca profundidad, con canaletas, camas de algas y fondo oscuro pero con aguas cristalinas, al igual que el río Grande. El agua corre más lento y cuenta con pozones que deben llegar facil al metro o dos, esto hace que sea un río vadeable en casi su totalidad, el agua circula hacia el océano atlántico, lo cual lo hace un río apto para pescadores zurdos, ya que para todo chileno en un río que circula al revés.
No es difícil ver en que parte están situadas las truchas esperando su alimento, ya que la línea de espuma esta demarcada perfectamente en casi la totalidad del río. En algunos tramos la línea de espuma pasa por al medio y en algunos por las orillas y es ahí donde se marca la mejor zona de pesca en donde presentamos las moscas. No es raro en las fechas de; abril, mayo, pescar alguna seatrout que sube a desovar y llega al lado chileno.
Aquella tarde no había viento en el río Penitente, las ráfagas que se sentía eran mínimas, el día había estado nublado y con débiles rayos de sol, buena presión atmosférica, y aproximadamente unos 10 a 15 grados Celsius, la cual dio una actividad muy importante en la pesca de la tarde, o por lo que nos quedaba de tiempo en la estancia Penitente.
La pesca comenzó difícil, llegar a un río que uno no conoce y comienza a descubrirlo era un verdadero baúl de sorpresas. Había pasado por lo menos un par de horas y había tenido un par de subidas y había capturado una trucha de por lo menos 500Gms pescada con una emergente de caddis. La acción llegaría más tarde y me decidí por ir a pescar los codos o curvas del río, en donde por lo general se forman unas canaletas de barro en donde se hacen cuevas, ya que había visto este tipo de estructuras de aguas en río de la patagonia Sur. Y decidí por solo pescar estos lugares.
El resultado de esta búsqueda, fue encontrar en las curvas del río cerca de 2 a 3 truchas de buen tamaño comiendo en superficie, se podía ver perfectamente como las truchas comían arriba, ya que dejaban pequeñas argollas en el planchado río Penitente.
Mi afán por pescar esas truchas me hizo por lo menos estar unos 15 a 20 minutos tratando de tener una buena estrategia para poder pescarlas, ya que por el tipo de agua, sabia que si le posaba la línea encima u hacia algo mal, inmediatamente me despedía de esas truchas que comían desenfredamente en la superficie.
Y así, en esa eclosión de dípteros, logre que tomara una goddar caddis atada en un anzuelo numero # 14, mosca que después de muchas ate en mi tippet 4X, ya que la selectiva trucha ya había visto varias moscas, hasta que una enérgica marrón tomo una de las ultimas moscas que se me habían ocurrido presentarle al río.
Las moscas de goma eva, aquella tarde no sirvieron absolutamente de nada ya que en los intentos un par de truchas subieron y las rehusaron, lo que fue el hincapié perfecto para tener una buena tarde de pesca con moscas secas clásicas.
El río penitente cuenta con una población entomológica de caddisflies y midgesflies en su mayoría, con un poco porcentaje de efímeras, haciendo un conteo aproximado de la actividad de insectos que se veían en los ríos. En la tarde suelen volar grandes polillas, que las truchas suelen comer.
Las emergentes de caddis, en números #14 y #16 fueron las mejores moscas de la jornada. Logrando tomadas de truchas bien enérgicas y robustas entre el kilo a dos, en su mayoría muy enérgicas y decididas a dar pelea para luego ser liberadas.
La pesca con polillas debería ser fabulosa en la hora de la noche,
ya que las truchas de mayor tamaño fueron pescadas con moscas secas
stimuladoras que rayaron suavemente el agua del río para engañar a
alguna trucha marrón. Aquella noche habíamos logrado por lo menos 5 a 10 capturas de truchas buenas por caña, lo cual nos dio una "pasadita", por el río Penitente que jamás olvidare.
El río penitente es un río no apto para pescadores de cucharilla, ya que en la sección estancia penitente, tiene baja profanidad y bastantes camas de algas y canaletas las cuales impiden el trayecto de las herramientas de pesca.
Artículo dedicado a mi amigo Patrick Marcus.
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Al regreso de la pesca del Río Serrano aproximadamente cerca del medio día, junto a mi amigo Patrick, habíamos acordado que seria bueno llegar a darle una “pasadita” al río Penitente que nace en Chile, río que pasado la frontera con Argentina tiene el nombre de río Gallegos, siendo el río Penitente el principal aporte tributario del Gallegos del lado Argentino.
