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Mi Primer Chinook
Varios son los relatos de capturas de los grandes salmones Chinook en las aguas de varios ríos de la región de la Araucanía y Los Ríos desde hace algunos 5 años aprox. y numerosas historias contadas por mi amigo Patricio Salas y Don Kiko Nualart comenzaron a despertar mi interés por estos gigantes de las aguas, las historias hablan de cortes de líneas, carretes que quedan inservibles ante el poder de estos salmones, carreras explosivas de más de 30 m, etc, datos que no dejan indiferente a cualquier pescador…








En una visita de pesca en un río cercano al pueblo de Liquiñe tuve un primer encuentro con estos salmones, ya era tarde y siendo esta junto con la madrugada los horarios favoritos con mayor actividad para éstos peces, me encuentro con unos “megachapoteos” en un pozón y luego de conversar con unos lugareños que estaban apernados pescando en dicho lugar confirmo que se trata de los Chinooks, dado que no estaba pescando con el equipo adecuado y ya debía regresar a Coñaripe quedo la cita pendiente con ellos. Dos semanas más tarde se organizo una salida a acampar por una noche a orillas del río junto a mi hermano y mi pequeño sobrino ferviente pescador con mosca, seria en esta visita cuando me prepare para poder capturar un Chinook.

Llegamos a eso de las 7 de la tarde y entre acomodarnos y armar el campamento estaba en el pozón a eso de las 7:30, los salmones todavía estaban ahí, caña Nº7, línea Mastery de 200 grains y un streamer de la punta del tipet, el Pato me había comentado que esta es la pesca de los 1001 tiros, y efectivamente , me mantuve en ese lugar hasta las 10:30 de la noche aprox. y nada, ciertamente cada cierto rato asomaba alguno en la superficie sacando pica pero ninguna picada, me devolví al campamento a comer algo tomarnos un vinito junto a la fogata y descansar para aprovechar la mañana del día siguiente ultima chance para hincarles el diente.

A la mañana siguiente la diana fue a las 6:30, rápidamente en pie armando el equipo para estar luego de 10 minutos en mi pozón, llego al lugar y asoma uno a la superficie así como para saludarme, luego de unos 10 lanzamientos me cambio de posición, hago un cast de unos 15 a 20 metros, espero unos cuantos segundos para que tome profundidad la mosca y comienzo a recoger, ya tengo la mosca a mi vista a unos 5 metros de mi posición y veo que comienza a asomar a la colita de mi mosca una sombra (adrenalina subiendo) se tira una vez “ CRESTAAAA no le apuntoooo”… DOS y siento la presión sobre la caña y mi dedo índice, acto seguido la caña hacia arriba y a clavar se ha dicho, TE TENGOOOOO, rápidamente se arranca a tomar profundidad y a sacarme la línea, carreras van, recogidas vienen, así estuvimos por unos 7 minutos, cuando ya estaba algo cansado lo comienzo a guiar hacia una playa de piedras a unos 20 metros río abajo de mi posición para poder cobrar mi captura, éxito, por fin atrape uno.



En resumen puedo decir empíricamente que la pesca de estos salmones no es fácil, hay que ser perseverante y tener paciencia, probar diferentes tipos de presentaciones y no perder la fe que en cualquier momento puedes tener alguno prendido de tu mosca, el Chinook que capture no era para nada grande, peso 3 kilos, pero fue muy gratificante y voy ahora a la pesca de uno más grande.

Claudio Rodríguez Martínez
www.claudiorodriguez.cl


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